De los datos que maneja el portal inmobiliario Idealista, Boadilla del Monte se encuentra entre las diez localidades con precios de vivienda más caros en la Comunidad de Madrid. Es la novena área más cara de la región, con un precio medio el metro cuadrado en febrero de 2.471 euros (la capital, Madrid, es la primera). Ha variado al alza un 0,9% en los últimos tres meses y un 4% entre febrero de 2020 y febrero de 2021. Aún así, el precio por metro cuadrado en Boadilla del Monte está un 33% por debajo de Madrid (a 3.687 euros de media).
“En Boadilla seguimos experimentado un creciente interés por parte de muchas personas que nos han elegido como localidad para residir. Esto se produce como consecuencia de la alta calidad de vida que ofrecemos aquí; grandes zonas verdes, parques infantiles, excelentes servicios públicos, limpieza, seguridad y una presión fiscal mínima. La combinación de estos ingredientes es el éxito de este municipio”, asegura Ignacio Miranda, concejal responsable del área de Urbanismo en el Ayuntamiento de Boadilla del Monte.
La construcción, sin parar
La construcción es un sector que ha aquí ha ido viento en popa los últimos años. Nuevos desarrollos como Cortijo Norte y Cortijo Sur, donde hace apenas cuatro años no había nada, están actualmente al 62% y el 71% de su capacidad, respectivamente. Promotores y constructores tienen a su favor un PGOU estable y un procedimiento administrativo rápido a la hora de tramitar y aprobar licencias de obras: entre tres y cinco meses. Mientras, en municipios como Majadahonda y Pozuelo de Alarcón tardan entre 16 y 14 meses.
Promotores y constructores tienen a su favor un PGOU estable y un procedimiento administrativo rápido a la hora de tramitar y aprobar licencias de obras
En paralelo a la concesión de licencias de primera ocupación, han ido llegando nuevos vecinos. El incremento de la población en los últimos tres años –ya por encima de los 60.000 habitantes– lo ha hecho a un ritmo por encima de los anteriores.
Si en 2017 creció un 2,2% respecto al 2016; en 2018 lo hizo un 3,7%, con 1.944 vecinos más empadronados; un 4% en 2019 (2.164 nuevos empadronados); y en 2020, a falta de conocer las cifras oficiales, el aumento rondaría el 5,8%, con la llegada de 3.300 nuevos vecinos, principalmente a los nuevos sectores.
Más demanda de obra nueva
Desde la Inmobiliaria Bargan, una empresa que lleva 40 años trabajando aquí, Gema Barragán, su responsable, hace hincapié en el “ligero descenso de inmuebles de segunda mano en venta y un aumento de oferta en el alquiler este último año”.
Sobre los precios: “Estamos a la expectativa. Probablemente se vea más perjudicada la vivienda de segunda mano que la obra nueva”, opina. Pero aclara que “no hemos notado una bajada del precio. Lo que no descartamos es que, si la situación de la pandemia se alarga mucho más en el tiempo, es posible que los precios en la venta se puedan resentir y la crisis empiece a afectarnos más directamente”, advierte.
"La crisis sanitaria que llevamos padeciendo desde hace más de un año nos ha hecho replantearnos mucho las cosas a la hora de decidirnos a comprar"
El concejal de Urbanismo, Ignacio Miranda, señala por su parte que, “si bien es verdad que dentro del marco de la pandemia y la crisis económica que vivimos actualmente el mercado inmobiliario también se está viendo perjudicado, lo cierto es que parece que Boadilla no se resiente demasiado”. La causa: ese efecto huida de Madrid capital en busca de viviendas más amplias, con jardín...
Lo resume Gema Barragán: “Boadilla del Monte es un municipio muy bien situado y en plena expansión, en el que se disfruta de una tremenda calidad de vida por estar rodeado de un entorno natural incomparable. Por eso entendemos que la gente se encuentra cómoda viviendo aquí y hay tanta demanda en la compra y tan poca oferta".
Además, continua, "la crisis sanitaria que llevamos padeciendo desde hace más de un año nos ha hecho replantearnos mucho las cosas a la hora de decidirnos a comprarmás vivienda unifamiliar individual que vivienda en altura... Aunque, claro está, la demanda de vivienda de cualquier tipo siempre existe. Esto es fruto del confinamiento vivido: notamos que la gente prefiere disfrutar de un espacio amplio y verde antes que vivir en el centro y estar limitado en espacios abiertos y al aire libre”.
Otra inmobiliaria presente en la zona, Inmoges, confirma también esta tendencia y cómo tras el confinamiento “se disparan las operaciones tanto en alquiler como en venta en nuestro municipio atrayendo a familias sobre todo del centro de la ciudad de Madrid, después de haber pasado por un confinamiento en la ciudad”.
El sector bancario en la zona también han notado otro movimiento de vecinos dentro el mismo municipio, que pasan de residir en un piso o adosado al unifamiliar
Sobre el futuro, creen que “es difícil de predecir, aunque sí que es verdad que se espera que la economía en general se resienta aún más y con ello podamos empezar a ver nuestro sector más paralizado”, alertan.
También en el sector bancario en la zona han notado otro movimiento de vecinos en el mismo municipio que han pasado de residir en un piso o adosado, al unifamiliar independiente o en urbanización con zonas comunes, oferta habitual en los nuevos sectores.