Mascotas

Celo y ciclo sexual en perras

El ciclo sexual de las hembras caninas se conoce como ciclo estral e incluye una serie de fases que hay que conocer para poder cuidar la salud del animal y evitar embarazos.

 

La perra es una hembra monoéstrica no estacional, es decir, que tiene un único estro (momento de la ovulación) por cada ciclo y este se puede producir en cualquier momento del año. Lo habitual es que las perras tengan dos ciclos al año y comienzan cuando han alcanzado la madurez sexual.

Fases

Cada ciclo estral tiene cuatro fases:

  • Proestro

Empieza el sangrado, que marca el inicio del ciclo y es anterior a la ovulación. Dura de ocho a once días, aunque puede variar con cada hembra desde tres días hasta varias semanas. Durante ese tiempo, la hembra atrae al macho pero no permite la monta.

  • Estro

Comienza cuando la hembra cesa el sangrado (solo queda una secreción marronácea) y se muestra receptiva a la monta por el macho. Aquí aparece la ovulación y puede ocurrir tanto en los primeros días de la fase como en los últimos. Dura unos 10 días, aunque varía en cada hembra.

  • Diestro

Se manifiesta cuando la hembra vuelve a rechazar al macho para la monta y puede durar hasta dos meses. Puede haber secreciones vaginales pero cada vez mas claritas. En esta fase existen niveles altos de progesterona que, aunque no haya embarazo, pueden producir desarrollo mamario, secreción láctea y cambios en el comportamiento. En ocasiones, puede necesitar tratamiento.

  • Anestro

Es la última fase del ciclo y la más larga, puede durar de cuatro a cinco meses. Es el periodo de tiempo que existe entre dos ciclos, es decir, que el final de esta fase supone el comienzo de un nuevo ciclo.

Es conveniente anotar los celos que va teniendo la hembra, para que el veterinario pueda discernir si hay algo patológico o no.

Prevenir los embarazos

Es importante conocer los comportamientos que puede adoptar una perra en las diferentes etapas de su ciclo, especialmente en las fases que muestra receptividad al macho, para evitar gestaciones no deseadas (cuando no esté castrada ni esterilizada).

Si se tiene jardín en casa, hay que asegurarse de que otros perros no tienen acceso

Hay que ir con cuidado en los paseos pero también en casa, si convive con machos enteros (en cuyo caso habría que separarlos para evitar la monta). 

En el caso de disponer de terraza o jardín en casa, hay que comprobar que otros perros no tienen acceso ya que el olor de la hembra los atrae y pueden llegar a acceder de formas sorprendentes.