Mascotas

Artrosis en gatos: ¿es posible?

Pues lo cierto es que sí. Aunque normalmente se habla de la artrosis en perros, los gatos también pueden padecerla. De hecho, la sufren hasta el 40% de estos felinos.

 

La artrosis es una patología muy extendida en los gatos, sin embargo, está infradiagnosticada. Se calcula que solo entre el 10% y 15% llegan a ser diagnosticados. La razón es que, a diferencia de los perros, muy raramente cojean y no parecen tener molestias (al menos del modo al que estamos acostumbrados). Pero, por supuesto, sufren dolor y lo manifiestan a su manera.

Síntomas

En los gatos, el dolor produce reducción de la movilidad:

  • No saltan a lugares elevados y se muestran dubitativos cuando lo hacen.
  • Al bajar de sitios altos también dudan y tienden a hacer saltos más pequeños en vez de bajar de un solo impulso.
  • Cuando suben escaleras ,saltan con ambas patas posteriores al tiempo (saltos tipo conejo).
  • Cuando bajan, lo hacen de lado y se toman descansos. 
  • Dudan a la hora de iniciar juegos de persecución y se paran a descansar.

Vemos que los síntomas son muy diferentes a los de los perros. Pero eso no quiere decir que no sufran. Además se genera un círculo vicioso que empeora paulatinamente el estado del animal.

Tratamiento

Si crees que tu gato tiene este tipo de comportamientos, no dudes en acudir a tu veterinario. Como en el caso de los perros, el tratamiento es preventivo y paliativo. La prevención incluye el uso de dietas adecuadas y el ejercicio físico necesario.

Con el tratamiento paliativo se procura un avance lo más lento posible. Se pueden usar, como en el caso de los perros, condroprotectores, antiinflamatorios, analgésicos y fisioterapia. Pero, actualmente, disponemos de un tratamiento novedoso a base de anticuerpos monoclonales de alta eficacia. Este tratamiento de última generación nos permite procurar una buena calidad de vida al animal con una sola inyección mensual. Desde hace varios meses ya usamos un tratamiento similar en perros con excelentes resultados.

Recuerda que tu gato no tiene por qué sufrir el dolor de la artrosis sea cual sea su edad.

 

CV Prado de Boadilla