Ante el comunicado de prensa remitido por el Grupo Socialista del Ayuntamiento de Boadilla del Monte en donde manifiesta que, en la última Comisión Informativa de Seguridad Ciudadana, el equipo de Gobierno municipal respalda una moción de su grupo en el que reconoce que la dotación de la Guardia Civil destacada en Boadilla es suficiente para garantizar la seguridad en Boadilla, desde el consistorio se quiere puntualizar lo siguiente:
- Que es de sobra conocido el apoyo, respeto y confianza que el Ayuntamiento de Boadilla del Monte manifiesta hacia el Cuerpo Armado, reconociendo en todo momento su importantísima labor, pero que en ningún caso respalda las declaraciones del Grupo Municipal Socialista en el que se reconoce que la dotación de efectivos es suficiente para garantizar la seguridad en nuestro municipio.
- Son innumerables las veces que el Ayuntamiento se ha dirgido a la Delegación del Gobierno de la Comunidad de Madrid denunciando la falta de efectivos reales en el término municipal de Boadilla, ya que de los 70 agentes acuartelados en nuestro municipio, tan solo una o dos patrullas (4 agentes) vienen prestando en la actualidad un servicio de manera permanente y regular en Boadilla. El resto de efectivos tienen otras asignaciones o atribuciones que para nada les vinculan con Boadilla, desempeñando sus cometidos en otros lugares fuera de nuestro municipio. Esta actitud es la que el equipo de Gobierno viene denunciando de un tiempo a esta parte. Mientras que la Policía local se ha reforzado notablemente, cuadruplicando su plantilla en poco más de 4 años, y con ayuda de la Comunidad de Madrid, la Guardia Civil no se ha adaptado a las nuevas circunstancias.
El PSOE de Boadilla denuncia que el Gobierno local trata de obtener rédito político con sus declaraciones recriminando a la Delegación del Gobierno, pero lo cierto y verdad es que es el propio Partido Socialista de Boadilla quien con una moción trata de engañar a los boadillenses anunciando que el Gobierno Municipal les apoya, y por otra parte tratando de excusar o maquillar la dejadez y falta de responsabilidad de la Delegación del Gobierno en la Comunidad de Madrid.