Educación

Polémica por el relevo de empresas en la gestión de Tákara

Una nueva empresa ha ganado el concurso para gestionar, durante al menos los próximos cinco años, la escuela infantil pública Tákara. Un relevo que no ha gustado nada a los padres, contentos con la gestión del anterior equipo, ni al personal, que se queda en la calle.

 

Una nueva empresa –Ebasan Bastante S.L.– gestionará la Escuela Infantil Tákara durante al menos los próximo cinco años, tras el fallo del concurso convocado al efecto por parte del Ayuntamiento de Boadilla del Monte.

 

Atrás se ha quedado la cooperativa Piaget, empresa que ha gestionado esta escuela infantil los últimos ocho años. Su proyecto, como han señalado perplejos muchos padres cuyos hijos han pasado por el centro o aún se encuentran en el mismo, fue el que más puntos obtuvo en el concurso en la parte educativa, pero no ha sido la mejor propuesta económica.

 

Al final, dicen molestos, “ha primado lo económico sobre el proyecto educativo”, lo que ha dejado fuera a lo que ellos consideran “son los galácticos de las escuelas infantiles”, por su dedicación e implicación en el proyecto durante los últimos ocho años, lo que se ha traducido en la calidad de la formación que han recibido sus hijos.

 

Padres afectados, profesores y personal de la antigua Tákara le trasladaron el  malestar por el resultado del concurso al equipo de gobierno municipal tras la finalización del pleno celebrado el pasado mes de julio.

 

Reconocimiento

 

Desde el Ayuntamiento, como respuesta al malestar surgido entre los padres, se ha reconocido el trabajo desarrollado hasta ahora en esta escuela infantil “y lamentamos que no haya resultado adjudicataria de esta concesión. Sin embargo, se trata de una escuela infantil pública y los procesos de adjudicación de su gestión son muy claros: se debe realizar un concurso público conforme a unos pliegos de condiciones y resulta adjudicataria la empresa que mejor oferta presente conforme a los criterios establecidos, tal y como ha sucedido”.

 

El equipo de gobierno se ha comprometido, a su vez, “a garantizar que la enseñanza que va a impartirse en Tákara se ajuste a los niveles de calidad por los que siempre se ha caracterizado esta escuela”.

 

Además de Tákara, hay otra escuela infantil pública en Boadilla gestionada por una empresa privada, de la que depende también su personal. Se trata de Achalay! En ambos casos el Ayuntamiento y la Comunidad han puesto las instalaciones, pero se ha sacado a concurso la gestión del centro, fórmula cada vez más habitual.

 

Romanillos es la única escuela infantil que depende directamente de una institución pública. En este caso, del mismo Ayuntamiento de Boadilla del Monte.