La Casa de Aves, el aviario o gallinero del Palacio del infante don Luis, forma parte del conjunto palaciego junto con el estanque, la noria, los jardines, la huerta y la fuente.
Un edificio del siglo XVIII firmado también por el arquitecto Ventura Rodríguez y que el infante mandó construir para albergar su colección de animales vivos, como cabras de angora, un oso o una cebra, que vivía en semilibertad en los jardines.
Es el único de estas características que se conserva en España y de los pocos de Europa. De ahí su importante valor.
En estado de ruina tras muchos años de abandono, a finales de 2020 se iniciaron los trabajos de rehabilitación del edificio y su entorno. Una actuación en la que se invirtieron 1.171.563 euros, cofinanciados al 50% por el Ayuntamiento de Boadilla y el FEDER en el marco del Programa Operativo Plurirregional de España (POPE) 2014-2020 dentro de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (EDUSI).
El conjunto engloba dos edificios: el propio aviario y la casa del guarda.
- El aviario se define por una planta circuar con patio central y pozo, y está dividido en 14 estancias perimetrales para albergar a los animales a cubierto. Cada una tenía una pequeña trampilla de salida a la parte exterior de estas jaulas.
- A este curioso edificio con forma de anillo se adosa otro en forma de “T” destinado a los usos vinculados con el aviario. Y en la parte trasera se encuentra la casa del guarda.
