El restaurante La Cañada, propiedad de la familia Verdasco y especializado en cocido madrileño, asados y sus famosos buñuelos de manzana, echa el cierre tras una histórica y larga trayectoria de 52 años en nuestro municipio. Un establecimiento que ha sido testigo de muchas celebraciones familiares de vecinos de Boadilla del Monte. El pasado 15 de enero dijo adiós.
Aunque aún no está cerrada la operación, distintas fuentes consultadas señalan que en los terrenos que ha ocupado hasta ahora el restaurante más longevo de Boadilla, así como otras fincas colindantes, se instalará uno de los grandes grupos hospitalarios con presencia en España.
Tras el cierre, los hijos de uno de los propietarios del restaurante continuarán con el negocio en la zona en nuevo local en la calle Isabel II.
Un restaurante con solera
Los pilares que sostentan la historia del restaurante La Cañada se remontan al 1870, cuando la matriarca de los Verdasco, Cándida Santos, más conocida como La Rayúa, llegó a Madrid desde Asturias para inaugurar el famoso restaurante La Bola, en el Madrid de los Austrias. Desde entonces la familia, asentada en la capital, se ha criado entre fogones.
Ya en el año 1970, Agustín Verdasco, abuelo del tenista Fernando Verdasco, decidió fundar el restaurante La Cañada aquí en Boadilla, cuando quedó enamorado del enclave natural donde se encuentra hoy la parcela. Hasta el día de su cierre ha seguido gestionado por la familia.
Fernando Verdasco, tío del tenista, junto con la ayuda de sus hijos Laura y Marco, ha sido el que ha dirigido el restaurante a lo largo de los últimos años. Ahora les toca decir adiós a este bonito proyecto con más de medio siglo de historia a sus espaldas.