Centenares de vecinos de Boadilla del Monte han participado en los actos litúrgicos asociados a la festividad de San Sebastián que han culminado con el regreso del santo a su ermita, tras la restauración del edificio situado en la calle Mártires, en el caso histórico del municipio.
La tradicional Misa en honor al santo ha sido oficiada por el obispo de Getafe, Joaquín María López de Andújar. A continuación, ha salido la procesión hasta la ermita, bendecida por el prelado. Tras los actos litúrgicos ha llegado el turno de la subasta que organiza anualmente la Hermandad de San Sebastián, y del cabildo o invitación a un aperitivo a todos vecinos.
La obra ha contado con un presupuesto de 81.000 euros y es fruto de un convenio suscrito entre el Ayuntamiento de Boadilla y el Obispado de Getafe, por el que el Consistorio ha asumido su coste.
Hace varios años, filtraciones de agua, humedades y otras deficiencias hicieron que la Hermandad decidiese cerrar la Ermita y trasladar la imagen de San Sebastián a otro lugar, aunque la tradición se resintiese por ello.
El alcalde de Boadilla del Monte, Antonio González Terol, ha felicitado a la Hermandad de San Sebastián por haber mantenido a lo largo de los años la tradición y la devoción por este Santo y por su constancia al solicitar la restauración del edificio. También ha expresado que la obra es "resultado del compromiso del equipo de gobierno por mantener las tradiciones locales y devolver su esplendor al rico patrimonio histórico-artístico de Boadilla del Monte".
Una edificación del siglo XVII
La Ermita de San Sebastián es un edificio del siglo XVII de influencias barrocas similar a otros valiosos inmuebles de la época como el Convento de la Encarnación, también situado en la calle Mártires.
La actuación ha permitido recuperar la cubierta del edificio y ha restaurado las paredes, suelos, carpinterías y pintura hasta devolver el aspecto original del edificio.