Grande era la distancia en la clasificación de ambos equipos y los locales salieron algo fríos ante un equipo gallego que vino a Boadilla con la intención de dar la sorpresa, y a tenor de lo visto, con el juego de los rojiblancos muy bien estudiado.
La defensa 5:1 no pudo parar el fluido ataque gallego que lograba cómodas posiciones de lanzamiento y le bastaba para ir mandando en el marcador. En ataque los locales no lograban el ritmo adecuado para superar una defensa muy plana en la que los atléticos echaron de menos los lanzamientos de Eduardo Beret, con problemas en el hombro.
Sólo cuando el entrenador local ordena un cambio defensivo a 6:0 los atléticos vuelven a ser el equipo contundente a que nos tiene acostumbrados y logran un parcial de 8-1, con un Miguel Lucas espectacular en el contraataque, lo que les lleva a irse al descanso con una ventaja de 6 goles, 17-11.
Una segunda parte loca
Según se había desarrollado la primera parte, todo indicaba que los atléticos acabarían rompiendo el partido en esta segunda parte. Y así parecía, ya que pusieron distancias de ocho goles en el marcador que auspiciaban una victoria cómoda. Pero los locales no logran rematar la faena y comienza una fase de locura de pérdidas de balón, exclusiones y decisiones arbitrales comprometidas que convierten el juego en un ir y venir que aprovechan los gallegos para ponerse un gol arriba (25-26 a falta de 10’) para finalizar el encuentro.
Tiempo muerto que solicita el entrenador local para templar nervios e intentar recuperar el ritmo necesario de partido. A partir de este momento, los de Boadilla vuelven a asentar su defensa 6:0, apoyada en la seguridad en la portería de Luis Castellar, recuperan la tranquilidad en ataque, y en poco más de 10 minutos logran un parcial de 7-1 que les garantiza los dos puntos y sumarse a la terna de colíderes junto a Lalín y Novas, principales rivales hoy por hoy para los puestos de privilegio.
Lección importante la que dio el Bueu a los rojiblancos: con su lucha y entrega, no hay enemigo pequeño, reafirmando el buen nivel de todos los equipos de este grupo A, quizá el más igualado de todos.
Próximo partido:
Este fin de semana, primera visita de los Atléticos a Pontevedra para medirse a el BM Cisne Grupo Pirsa a las 17,45 horas. Los rojiblancos deben continuar sumando puntos fuera de casa para no dejar el puesto de privilegio que ostentan en estos momentos. Según pasan las jornadas, los equipos de cabeza mantienen el nivel y se vislumbra una liga larga y dura hasta el final.