Reportaje

Arenas de San Pedro: qué visitar

El lugar en el que murió el infante don Luis se encuentra a 160 km de Boadilla. Una localidad de 6000 habitantes enclavada a los pies de la Sierra de Gredos. Ahí podemos disfrutar, además de su hospitalidad, de su rico entorno natural, su importante patrimonio histórico o la gastronomía de la zona. Así que bien merece una visita el pueblo con el que Boadilla del Monte se ha hermanado.

 

A 160 kilómetros de Boadilla del Monte y poco más de una hora y media en coche por una carretera que transcurre por el exuberante pie de monte de la Sierra de Gredos se encuentra Arenas de San Pedro, un municipio situado en el extremo sur de la provincia de Ávila y en la vertiente meridional de la sierra citada de cuyo parque natural forma parte. Es la capital del valle del río Tiétar y cuenta con más de 6000 habitantes, agrupando otros tres núcleos de población: Hontanares, La Parra y Ramacastañas.

La página web de turismo del Ayuntamiento es muy completa y nos informa sobre dónde dormir y comer, lugares de interés, rutas, qué visitar e incluso podemos escuchar las audioguías de los sitios y personajes más importantes de la localidad y su historia.

Si preferimos acudir directamente a la oficina de turismo, la encontraremos en el edificio del antiguo mercado de abastos (calle de la Triste Condesa, 1).

Naturaleza

Arenas cuenta con un medio natural ubérrimo donde destacan los pinos, castaños y robles, con un paisaje serrano surcado de numerosos cursos de agua que dan lugar a numerosas rutas senderistas

En su web incluye 12 rutas, la mayoría de las cuales parten del mismo núcleo urbano, por parajes sombreados por densa vegetación y agua, una de las constantes en los terrenos de esta localidad. Rutas sencillas algunas de las cuales se pueden realizar en familia y que se pueden complementar con un chapuzón en alguna de las charcas o tablas del Río del Arenal, como por ejemplo la denominada Senda de los Pescadores, de unos 11 km, perfectamente señalizada y balizada en algunos tramos, que transcurre paralela al arroyo en todo su recorrido.

En las afueras de Arenas encontramos unas preciosas piscinas naturales que embalsa el río del Arenal, con praderas naturales de césped, sombrillas, aparcamiento y sitios para tomar algo.

En su municipio se pueden visitar las conocidas cuevas del Águila, descubiertas de manera fortuita en 1963 por cinco jóvenes. Una cavidad con un recorrido de 1000 metros a una profundidad de 50 metros, adaptada para la visita turística y donde podemos ver el río subterráneo y numerosas formaciones kársticas, como estalactitas y estalagmitas de diferentes formas y tamaños.

 

Historia y arte

Por su parte, el patrimonio histórico de Arenas no es nada desdeñable. En primer lugar citaremos el magnífico castillo que se localiza en el centro de la localidad. Cons- truido el año 1400 por orden del condestable de Castilla, Ruy López Dávalos, y donde llegó a residir el gran condestable Álvaro de Luna. Se encuentra en perfecto estado de conservación, destacando el gran patio de armas, donde el ayuntamiento organiza conciertos veraniegos, y la torre del homenaje, cuyo interior alberga una sala de exposiciones, una de conferencias, un pequeño museo que nos ilustra sobre la historia del castillo y el museo Manuel Aznar, artista local que ha cedido su colección de pinturas, esculturas y obra gráfica.

A escasos 3 kilómetros encontramos en un entorno boscoso el Santuario de San Pedro de Alcántara, patrón de Arenas de San Pedro, cuyo origen se sitúa a inicios del siglo XVII. En el XVIII, y bajo Carlos III, sufrió una importante remodelación y es la imagen que nos ofrece hoy en día. En su interior alberga un museo de arte sacro y del propio San Pedro de Alcántara. Destaca la Capilla Real, que fue proyectada por el arquitecto Ventura Rodríguez a imagen y semejanza de la Capilla Real de Madrid.

El otro conjunto monumental más señero es el Palacio del infante don Luis, que construyó tras abandonar su palacio de Boadilla del Monte. Este palacio no llego a finalizarse ya que, por los planos que se conservan, se construyó únicamente en su mitad oriental. Su visita es muy interesante y se complementa con su uso expositivo para la recomendada colección de pintura contemporánea procedente de los ganadores del Concurso Internacional Gredos de Pintura, de larga tradición: en 2024 ya alcanzó la 45 edición. También se conserva la importante casa de oficios donde se alojaban los sirvientes y los jardines, que se están recuperando.

Las iglesias de Nuestra Señora del Amor Hermoso, la de Nuestra Señora de la Asunción y el puente medieval de Aquelcabos completan el conjunto monumental por el que pasear y sorprendernos descubriendo rincones llenos de encanto, como los antiguos barrios judío y musulmán. Un destino turístico de primer orden que no nos podemos perder.