Medio ambiente

Olivo milenario en la rotonda

 

Entre los árboles y vegetación que más sorprenden a quienes acuden de visita a la Ciudad Financiera del Santander, están los más de doscientos impresionantes olivos centenarios que adornan sus jardines, procedentes mayoritariamente de España. De ellos, más de un centenar son ejemplares milenarios en cuyos gruesos y retorcidos troncos se puede leer el paso de los años.

 
El caso es que, durante la firma del convenio con el banco para repoblar con árboles una parcela pública, el alcalde aprovechó la ocasión para pedirle al presidente de la entidad, Emilio Botín, que cediera al municipio uno de esos árboles históricos. Su idea, señaló, era colocarlo en una de las rotondas del pueblo para que los vecinos pudieran verlo. Dicho y hecho: Botín tomó nota y se comprometió a que el árbol estuviera antes del 1 de abril en Boadilla.


El ejemplar donado, procedente de una zona situada a las faldas de la sierra del Maestrazgo en el norte de la provincia de Castellón, llegaba finalmente a nuestro municipio el pasado 23 de marzo. Costó descargar sus más de seis toneladas de peso, pero finalmente ahí está.

 
Al árbol se le podaron parte de sus cuatro brazos para facilitar su transporte hasta Boadilla. Desde ese día se puede contemplar el ejemplar en la conocida como rotonda de las tinajas, ubicada en la confluencia de la carretera de Majadahonda con la calle Alberca, junto al Ayuntamiento.

 
Es probable que el consistorio coloque próximamente una placa informativa en sus alrededores, donde incluirá información sobre las características del ejemplar transplantado, bautizado con el nombre de Boadilla, y en reconocimiento a quien lo regaló.